Para nuestra empresa es imprescindible que el estudiante sea un agente activo dentro del proceso de enseñanza-aprendizaje. De ahí que siempre utilicemos un modelo educativo constructivista. Veamos algunas de sus características:

PROFESORADO ALUMNADO
Estimula la autonomía e iniciativa del alumnado. Responsable de su propio proceso de aprendizaje.
Fomenta el diálogo y colaboración entre los alumnos y alumno-profesorado. Goza de un escenario que le permite desarrollar su autonomía.
Estimula la curiosidad e interés del estudiante. Desarrolla la creatividad y pensamiento crítico.
Crea situaciones y experiencias con el fin de estimular la reflexión Realiza una participación activa.

Utilizamos una metodología basada en Learning by doing. Este método se basa en “aprender haciendo”, es decir, trasladando el ámbito pedagógico, al profesional. Existen estudios, que exponen que la asociación de la educación con el ámbito profesional, genera beneficios económicos al elevar la productividad de los trabajadores (Mungaray, 2007).

También está enfocada desde la perspectiva conectivista. Tal y como se diseña el curso, se está creando una comunidad, en la que se propicia la conexión entre los diferentes  nodos. Se realizan actividades que posibilitan la diversidad de opiniones, la alimentación y mantenimiento de la información,  una actualización continua de la misma y se crean situaciones en la que es necesaria la toma de decisiones (Siemens, 2004).

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